miércoles, 28 de mayo de 2014

Albóndigas de choco en salsa de curry suave y una historia del CSI.


Estaba yo hace una semana tan tranquila pensando en mis cosas, cuando sonó el teléfono. Era mi amiga Mónica.
- Ay, Maricruz, que acabo de llegar de Barcelona y cuando he subido a casa me he encontrado la puerta reventada, ¡me han robado!
- Anda ya... Si tú tienes una puerta con no sé cuántos anclajes y de madera maciza...
- Pues han debido meter una palanqueta o algo así, está toda destrozada y la casa revuelta. Estoy muy nerviosa.
- ¿Has llamado a la Policía? ¿Y Hugo, dónde está? Y sobre todo, no toques nada- Hugo es su pareja pero cada uno vive en su casa. Han estado unos días visitando Barcelona y acaban de volver.
- Hay una patrulla de camino. Hugo está en su casa, viene para acá también. Qué disgusto.


Como aparecieron los de la patrulla, la dejé con ellos y la fui llamando a ver cómo iba la cosa.
- Mónica ¿Cómo va todo?
- Los de la patrulla le hicieron una foto a mi carnet de identidad y la mandaron a la Central, como en las películas, oye.
- ¡Qué fuerte! Tú no seguirás teniendo ese DNI en el que sales con un ojo morado y con un aspecto lamentable de cuando te robaron en el metro de Madrid, que te desmayaste de la impresión y un señor te avisó de que tenías una lentilla en mitad del pómulo cuando te reanimaron ¿no?- Ahí fue cuando ya nos dio la risa porque a Mónica le robaron dos veces en el metro en Madrid, una de ellas le rajaron el bolso, le quitaron la cartera y ni se enteró. Seguro que la tienen en el fichero de 'Cacos Sin Fronteras', siempre le toca a ella, que ya sólo le falta que la asalten por la calle estilo Manos-arriba-esto-es-un-atraco, alguien con antifaz y camiseta a rayas horizontales.

Lo de la risa no es por los atracos, es porque cada vez que tenía que enseñar el carnet en cualquier sitio, se liaba a dar explicaciones de porqué tenía esa pinta de haber sido atropellada por un autobús.  La gente ponía unas caritas que no veas y a punto estaban de darle el pésame y todo.


- Y están aquí los de la Policía Científica, tomando fotos y huellas dactilares.
- ¿¡Qué me estás contando!? ¿Y van con los monos blancos y los plásticos en los pies como en el CSI? 
- No, pero vienen con un especie de caja de herramientas, han sacado los guantes, una lupa y el polvo para las huellas. Lo están poniendo todo perdido de un polvo negro que dan con un pincel, no es blanco como en las pelis. Te dejo que ha llegado el cerrajero.

Al filo de las ocho de la tarde, fue ella quien llamó.
- Esto se ha puesto interesante de verdad. 
- No me digas más: ha estado Grissom.
- Que no mujer, déjate de bromas. Ha venido un inspector y ha dicho que hay una banda por aquí, que entran en las casas cuando no hay nadie. Ya han robado en seis o siete casas.
- Eso te pasa por vivir en un barrio tan postinoso... ¿Y el cerrajero?
- Ha hecho un apaño hasta que los del seguro coloquen una puerta blindada. Ah, y no veas el ratito que he pasado cuando Hugo, que como es argentino habla un español del siglo XVII, le ha dicho muy serio: 'ya ha estado aquí el herrero'. Y yo he pensado: 'osti, a que va a resultar que tengo caballos y no me he enterado...'
Y claro, vuelta a reírnos y Hugo que no daba crédito a tanto jijí-jajá.
Total, que al final ha contratado una empresa de alarmas anti-robo, con cámaras de vigilancia, posibilidad de activar y desactivar desde el móvil, puede ver y oír lo que pasa en todo momento... sólo le falta una habitación del pánico, qué moderna.
Y le han puesto un cartel la mar de cantoso al lado de la puerta con el nombre de la empresa. Yo le he sugerido, que ya que está, coloque otro cartel que diga: "los vecinos tienen cosas mejores; a mí ya me han robado". Pero dice que a lo mejor a los vecinos no les hace gracia.

Albóndigas de choco.
Ingredientes.

500 gr de choco (sepia, jibia).
2 huevos.
1 cebolla.
2 dientes de ajo.
1 tomate sin piel ni pepitas y troceado pequeño.
Fumet de pescado.
1 cucharada sopera de curry suave.
Pan rallado.
Perejil.
Aceite de oliva.
Sal.

Elaboración.

Trocear los cuerpos de los chocos a cuchillo o en la máquina de picar.
Colocarlos en un cuenco grande con media cebolla, los dos ajos y perejil al gusto, todo muy troceado. Salar.
Añadir los dos huevos batidos y el pan rallado suficiente para que amalgame, procurando no excederse para que la masa quede suave y no se endurezca.
Dejar reposar unos 30 minutos.
Formar las albóndigas con las manos mojadas en agua, la preparación estará algo pegajosa. Pasarlas por pan rallado y freírlas hasta que estén doradas. Reservar.

Para la salsa:
Calentar unas cucharadas de aceite en una sartén o cazuela, y freír la cucharada de curry. Ahí mismo, hacer un sofrito con la media cebolla restante bien picada, los ajos y el tomate. Cuando esté listo, añadir una cucharada de harina, rehogarla bien. A continuación el fumet de pescado y calentar.
Introducir las albóndigas y cocer hasta que estén tiernas.
Las he acompañado de arroz basmati con pasas hidratadas en te caliente, orejones y piñones tostados.

Hoy no hay paso a paso ni video. No hice las fotos del proceso... 



domingo, 18 de mayo de 2014

Alubias blancas guisadas con codorniz en escabeche y el Juanito


Fue un amor a primera vista, un flechazo, la respuesta a mis oraciones. Allí estaba, en el gran centro comercial, blanco inmaculado, fuerte y al mismo tiempo suave, con gran apostura y capaz de hacerse cargo de todo lo que a mí me incomoda: era el cubo de basura perfecto; el que siempre estuve buscando. De 50 litros de capacidad, que no entiendo el porqué de los litros, ya que líquidos es lo último que se debe tirar a la basura y además, me hago un lío al comprar las bolsas que vienen por tamaño en centímetros y todavía soy incapaz de averiguar cuántos litros caben en 52x60 cm. El que teníamos era de 20 litros, de modo que compré este y al día siguiente lo llevaron a casa.

Y aquí está
Aquí cuando estoy guisando





















- ¿Y esto?-, dijo Natacha al verlo.
- El cubo de basura nuevo- contesté más contenta que unas Pascuas.
- Ahh... ¿Y aquí por dónde...?- preguntó mientras le daba la vuelta.
- A ver, por esta ventanita, se tiran las cosas pequeñas y cuando esté guisando, se levanta todo y aparece el cubo abierto. Mucho más cómodo. Y cada vez que meta un limón pocho, o una patata o algo así desde lejos, gano tres puntos-. Tuve que explicarle que esto último era broma, que no íbamos a organizar ningún concurso de triples en la cocina porque empezó a mirarme de una manera...



Desde entonces, todo el que llega se fija en el cubo y se asombra.
- Uhhh... ¿eso qué es?
- ¡Madre mía! ¡¿Qué es eso?!
- ¡Qué barbaridad! Es como un supositorio gigante.
- ¡Anda! Como dicen en mi pueblo, si sólo le falta hablar... - soltó Antonio cuando lo vio uno de los muchos días que viene a estar con nosotros.
Y yo tan divertida con los comentarios. -¿A que parece R2D2, el de la Guerra de las Galaxias?-
Cuando llegó Mari Carmen a pasar un finde, rápidamente dijo que era Obi Wan Kenobi.
- Mujer, ése era un humano, caballero Jedi por más señas y el personaje lo interpretó Alec Guinness.
- Bueno, da lo mismo.











Yo, acordándome de lo que había dicho Antonio, que sólo le faltaba hablar y como lo de "Wan" suena a "Juan" en español, decidí que lo íbamos a llamar Juanito. Hay quien cosifica a las personas; yo personalizo las cosas, manías que tengo.  Y como R2D2 es más difícil de pronunciar pues Juanito.
Cuando recogemos la cocina, si alguien pregunta,- ¿Esto dónde va?
- Eso, al Juanito- lo más normal del mundo.
Hace unos días, estaba yo trabajando en mi despacho y llegó Natacha poniendo su dedo índice entre mis gafas de leer y el teclado.
- ¡El Juanito me ha mordido!- Había tirado algo por la ventanita y se le atascó el dedo.
- Pues nada, ahora mismo voy y lo saco al patinillo al lado de la lavadora para que piense en lo que ha hecho.

Alubias blancas guisadas con codorniz en escabeche.
Ingredientes.

Alubias cocidas de bote de buena calidad.
1 l. de caldo de pollo o de verduras. En este caso, de pollo.
1 bote de muslos de codorniz en escabeche, especial para ensaladas.
1 cebolla grande.
1/2 cabeza de ajos.
Pimentón dulce.
Tomates secos rehidratados en aceite de oliva virgen extra *
Tomillo o romero.

Elaboración.

Disponer en la cazuela la cebolla, el tomillo, las alubias lavadas y escurridas, 3/4 de l. del caldo de pollo y 7 u 8 tomates.
Llevar a ebullición y mantener a fuego medio hasta que espese.
Hacer un sofrito con los ajos pelados y cortados y una buena cucharada de pimentón dulce.
Añadir al guiso y ajustar de caldo con el 1/4 de l. que hemos reservado.
Deshuesar los muslitos de codorniz y volcarlos sobre la cazuela.
Calentar a fuego suave y servir.

* Estos están preparados con: Ajos enteros pelados, tomillo, romero, mejorana, hojas de laurel, guindillas, pimienta negra en grano, sal y aceite de oliva virgen extra. 







lunes, 5 de mayo de 2014

Sardinas marinadas sobre crujiente de hojaldre roto con manzana asada, y el Reto de Canal Cocina


A Lope de Vega, Violante le mandó hacer un soneto y los de Canal Cocina enviaron a los blogueros cocineros un correo invitándonos a participar en un concurso: Reto Canal Cocina de recetas por 5 €.
Yo, tan contenta dije que sí y en mi vida me he visto en tal aprieto, igual que Fray Lope de Vega y Carpio por otros nombre conocido como El Fénix de los Ingenios o Monstruo de la Naturaleza, que ya suena un poco fuerte, la verdad.

Y es que me ha pasado de todo. Primero, me olvidé de subir que aceptaba el reto antes del día 7 de abril y cuando lo hice, resulta que no hubo manera de que pusiera el hashtag como es debido. Desde #retocanacocina, que le falta la 'l',  hasta #Retocanalcocina, he puesto de todo menos #RetoCanalCocina que es como había que ponerlo, cosas de no estar en lo que hay que estar que yo, cuando me despisto lo hago en condiciones, no de cualquier manera.

Hasta hoy día 5 de mayo, dos días antes de que acabe el plazo para publicar la receta, no he podido meterle mano al asunto, cosas de estar en cuarenta sitios a la vez que aparte de ser imposible, es muy inoperante. Ya lo dice el refrán: quien mucho abarca, poco aprieta. Como no soy Fénix de los Ingenios ni de nada ni falta que me hace, aquí estoy con la sensación de que me pilla el toro, se me acaba el tiempo, me quedo con la receta sin concursar, compuesta y sin novio, todo al mismo tiempo. Para colmo, no sé qué ha pasado con la web de Canal Cocina, que me dice que ha habido un problema para subir la receta, que lo intente pasados unos momentos. Pues creo que ya no me quedan muchos momentos. Si no fuera porque tengo mucha calma me agobiaría, pero no me agobio que eso es muy malo.
A ver si hay suerte y me entero de qué pasa con la web y mi receta. Mientras tanto, la pongo aquí para disfrute de todos.


Sardinas marinadas sobre crujiente de hojaldre roto con manzana asada.

Ingredientes.



250 gr Sardinas frescas
250 gr Masa de hojaldre congelada
100 gr Tomatitos Cherry
7 Dientes de ajo
3 Limones
Aceite de oliva virgen extra
Sal en escamas


Elaboración.

Limpiar las sardinas, quitarles la espina central y desangrarlas unos minutos en agua fresca.
Preparar la marinada con el zumo de los limones, sal, los dientes de ajo pelados y golpeados, un poco de agua y las cáscaras de los limones troceadas. Dejarlas un mínimo de tres horas.
Mientras tanto, descongelar el hojaldre, bolearlo y extenderlo con el rodillo en una lámina muy fina. Pincharlo y pintar con aceite de oliva.
Entrar al horno precalentado a 200º durante 15 minutos o hasta que esté dorado y crujiente.
Despepitar los tomates y cortarlos en brunoise fina.
Sacar las sardinas de la marinada, escurrir ligeramente, separar los lomos y cortarlas cuadrándolas al mismo tamaño.
Cortar el hojaldre con las mismas medidas que los lomos de las sardinas.
Montar el plato colocando una capa de tomate sobre el hojaldre, encima los lomos de sardina, pincelar de aceite con mucho cuidado y espolvorear con sal en escamas.
Acompañar con rodajitas de manzana reineta asada.